Con unas cajitas de quesitos en porciones, pintura acrílica, pegamento en barra, cartulina y velcro adhesivo podremos hacernos estas simpáticas y coloristas cajas de pared para decorar habitaciones y guardar objetos, como, en este caso, pequeños juguetes. El velcro nos permite quitarlas y ponerlas a nuestro antojo y, así, recolocarlas a nuestro gusto según nos vaya apeteciendo. Ideal para cuartos de niños o salas de juegos.